jueves, 22 de octubre de 2015

El fuego del Espíritu

Jesús nos habla en el evangelio de hoy (Lc 12,49-53) de ese fuego que ha venido a traer a la tierra... Al leer esto no he podido evitar acordarme del pasaje de los discípulos de Emaús (Lc 24,13-35) en el aquellos dos que se encontraron con el Maestro cuando pretendían "replegarse" recuperando su vida anterior tras el "fracaso" de la cruz, se preguntan cuando Jesús desaparece de su vista por el fuego que sentían en su interior mientras Él les explicaba las Escrituras.

Ese fuego es el Espíritu Santo que Dios ha derramado en nuestros corazones; el mismo que hoy nos explica a ti y a mí las Escrituras y que hace arder nuestro corazón porque Él, que es Fuego de Dios, lo habita. 

Ojalá que nos dejemos purificar por Él; que nos dejemos conducir y calentar permitiendoLe hacer nuevas todas las cosas cada día para ti y para mí al fecundar nuestro corazón con la Palabra que da vida, esa Palabra en y por la que fuimos creados, en la que somos, vivimos y existimos aunque no nos demos cuenta.