sábado, 5 de noviembre de 2016

Vivir "colgados" únicamente de Su Providencia

Hoy Jesús nos recuerda que no podemos servirLe a Él y al dinero, haciendo de éste un dios, y nos anima a ser honrados en el uso de ese medio que califica de vil (Lc 16,9-15).

Lo primero que se nos ocurre pensar al escuchar la voz del Señor esta mañana es hacer algo lícito al que Él mismo nos anima: servirnos del dinero para hacer el bien. Pero puede que Le agrade aún más que Le pidamos que nos enseñe a dejar de verdad nuestra vida y nuestros afanes en sus manos sabiendo que Él cuida de nosotros. 

Vamos a pedir a la Virgen que nos enseñe "el arte de la confianza". Que Ella nos sostenga para que podamos abandonarnos en las manos de Dios y así experimentemos en nuestra vida lo que significa ser hijos de un Padre providente; vamos a pedir a la Señora que nos haga tomar conciencia de nuestra dependencia absoluta de Dios. De este modo aprenderemos a descubrir los cuidados con los que el nuestro Padre del Cielo nos mima cada día.